Esta fecha fue establecida en 1993 por la Asamblea General de las Naciones Unidas, a propuesta de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO). Este día es una oportunidad para evaluar la libertad de prensa a nivel mundial, defender los medios de comunicación de los ataques sobre su independencia, así como de rendir homenaje a periodistas que han perdido sus vidas en el desempeño de su profesión.